Y es que, este Jueves Santo, 9 de abril, las puertas de la Iglesia Ntra. Sra. de Belén no se abrirán de par en par para ver salir al Santísimo Cristo de la Vera Cruz y a Ntra. Sra. la Virgen de los Dolores de la Hermandad Sacramental ante la emocionada mirada de miles de vecinos, pero sí permanecerán muy vivos en el corazón y en el sentimiento de los tomareños.

El Covid-19 no va a impedir que, en cada uno de los hogares, las familias unidas evoquen a sus cofradías, y recuerden las bellas y emocionantes imágenes de la Pasión de Cristo que todos guardamos en nuestra retina y en nuestra memoria.

El Covid-19 tampoco va a impedir que saquemos la túnica de nazareno, que los niños construyan sus pasos en sus casas, que nos embriaguemos con el olor a incienso y a azahar como tantas primaveras, que nos emocionemos con la inmensidad de la música de las Bandas de Tambores y Cornetas, o que disfrutemos de las torrijas recién hechas…

Porque nada va a impedir que los tomareños vuelvan a sentir su Semana Santa.

#QUEDATEENCASA